lunes, 22 de noviembre de 2010

La vida de los españoles por Beijing

Este fin de semana he estado con los españoles de Beijing. Estuve en casa de unos amigos de la familia de Villarreal y con un grupo de jóvenes españoles. Uno de ellos, compañero de la universidad.

Me comentaban que por China había unos 5.000 españoles. Muchos menos si comparamos con los más de 60.000 franceses y más de 100.000 alemanes. Aplicando una regla de tres en función de la población total de estos países, deberíamos ser más de 40.000 españoles por aquí.

Esta comparativa nos da una idea también sobre como estamos en otros ámbitos: número de empresas españolas, volumen de negocio de import/export, presencia de España en la vida de Beijing.



Cenando el típico pato pekinés, me sorprendía que los jóvenes españoles por aquí ya todos hablaban – mejor o peor – el chino. En general, estaban muy contentos con la experiencia que estaban viviendo. Nos reímos mucho con las anécdotas que comentaban entre los chinos y los occidentales.

“Sí” no quiere decir que estoy de acuerdo. Simplemente que te he oído. El chino por lo general lleva mal admitir que no lo sabe. Antes te dirá cualquier cosa o se quedará callado que reconocerlo.



La contaminación es evidente día a día. Poco a poco, va dejando sus efectos. El Templo del Cielo lo restauraron para las olimpiadas, y la pintura, ya se ve estropeada por la contaminación.

En las personas, los ojos se irritan más. Es difícil llevar lentillas. Las conjuntivitis son bastante comunes. La piel se reseca enormemente, salen rojeces. Y todo esto, tras menos de un mes. Con el tiempo viviendo aquí, seguro que a nivel interior – ej. el aparato respiratorio - también hay sus consecuencias.

Me comentaba uno de los españoles, que hay una escala que mide la contaminación y va de 0 a 500. Si en Europa superáramos los 50 habría un enorme “ruido social”. En Beijing, el viernes estuvimos a 450. Para que seais consciente del problema, un dato para comparar: en España mueren unas 16000 personas al año por culpa de la contaminación atmosférica (casi 5 veces que en accidentes de tráfico).



A nivel más casero, otra forma que me cuentan de medir la contaminación es ver si desde casa se ve o no la Torre de la TV. A tan sólo unos 3 kilómetros de distancia, la mayor parte de días la Torre de la TV no se ve.

Estuvimos visitando los mercados de la seda (Xiushuije) y de las perlas (Hongqiao). En ellos puedes comprar un montón de cosas muy baratas. Aunque algunas son falsificadas y otras de no tan buena calidad.

Por la noche, salimos por el área de Santilum y acabamos en Suzie Wong’s, una conocida discoteca de por aquí.

Es muy famoso también por sus vistas el bar del Gran Hyatt. Esta vez no nos dio tiempo acercarnos.

1 comentario:

  1. Hola Quique: De nuevo súper interesante. ¿Qué nos puedes contar de las energías renovables, la energía nuclear y el coche eléctrico que busca el gobierno Chino para reducir las emisiones de CO2? Si ellos lo consiguen se dará un gran paso hacia la sostenibilidad del planeta.

    Un fuerte abrazo

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